Como un ejemplo para el país fue calificado el departamento de Nariño, por la dirección nacional de la Unidad para la Atención y Reparación de las Víctimas.
La directora de esta entidad, Paula Gaviria Betancourt, de visita en Pasto, señaló que el trabajo mancomunado de la unidad regional ha permitido que se hagan intercambios positivos entre las víctimas y las entidades junto a la sociedad.
“El conflicto armado en Nariño ha dejado más de 360 mil víctimas, pero hoy podemos decir que de los sobrevivientes contamos con el 40 por ciento en actividades de restitución y reinserción laboral y en la sociedad, estamos trabajando duramente”, señaló Gaviria.
Destacó que en el proceso de paz y en el posconflicto se necesitan entidades más comprometidas, que siempre estén en la búsqueda de más recursos para mejorar la calidad de la convivencia en una eventual firma de la paz.
“He observado de cerca las actividades que realizan las diferentes unidades regionales y puedo decir con mucha tranquilidad que uno de los departamentos más golpeados por la guerra es uno de los que más acciones ha emprendido para mitigar el dolor que nos ha dejado la guerra”, señaló la directora.
Agregó que ha podido constatar el proceso que se adelanta con cada ciudadano, con cada familia que ha dejado el combate o que ha sido víctima del conflicto armado y hoy se han permitido la oportunidad de mostrar el avance social y educativo que han tenido gracias a la entidad regional.
Destacó que la unidad y el Gobierno Nacional ve con buenos ojos el avance en la región de lo que se lleva a cabo en materia educativa y formativa, lo cual representa un concierto de acciones para poner en las manos de los más vulnerables por el conflicto, herramientas para desenvolverse en el tiempo.
“Le acaban de decir a Colombia que aquí en Nariño están los campesinos, los agricultores, las víctimas junto a la sociedad civil, dando un paso adelante en su proceso de inclusión y nos tiene completamente feliz. Pasto y Nariño hoy son ejemplo para Colombia”, finalizó.